En la mayoría de estados australianos, los visitantes extranjeros, incluidos los estudiantes internacionales, pueden conducir un carro con la licencia de conducción emitida en su país de origen, siempre y cuando este permiso esté vigente, y esté acompañado de una traducción oficial en inglés. Sin embargo, dependiendo del estado en el que vivas, debes tener en cuenta algunas excepciones.

En New South Wales (NSW), por ejemplo, todos aquellos que tienen una visa australiana pueden usar su licencia de conducción extranjera vigente, traducida oficialmente al inglés, y solo por un máximo de tres meses. Luego de ese tiempo, la persona debe aplicar a una licencia de conducción de NSW para seguir manejando un vehículo de manera legal. 

En el caso de Victoria, al igual que en NSW, un visitante extranjero puede usar su licencia de conducción para manejar, siempre y cuando esté activa y formalmente traducida al inglés. La diferencia con el estado de NSW es que la persona no estaba obligada a aplicar a un permiso local después de un tiempo determinado. No obstante, las reglas cambiaron en Victoria y una nueva norma empezó a regir el pasado 29 de octubre de 2019. 

Entonces, si al momento en el que esta regla entró en curso estabas viviendo en Victoria, con una visa australiana, y conduciendo con el permiso de tu país, VicRoads, la autoridad encargada del tráfico y carreteras en el Estado, te da un plazo de seis meses, contados a partir del 29 de octubre del 2019, para que obtengas una licencia de conducción del estado de Victoria.

Ahora bien, si llegaste a Victoria como visitante temporal después del 29 de octubre de 2019, planeas conducir un vehículo con tu permiso de conducción extranjero, y piensas quedarte más de 6 meses en Australia, tienes un plazo de seis meses (contados desde el día que entraste al país) para sacar una licencia de conducción del estado de Victoria.

En cuanto al estado de Queensland, los extranjeros pueden manejar un vehículo con la licencia válida de conducción de su país. Por otro lado, en Tasmania y en South Australia, los visitantes están autorizados a conducir con una licencia emitida en otro país pero sólo será válida si está activa, y si está traducida oficialmente al inglés.

Aplicar a una licencia en Australia

La aplicación a una licencia de conducción en Australia puede variar en cada estado pero en general, la autoridad competente de cada lugar exige ciertos requisitos como facilitar documentos de identidad; el permiso de conducción extranjero (traducido oficialmente al inglés); el formulario de aplicación; y el pago respectivo. 

Asimismo, los solicitantes deben reservar una cita con la entidad autorizada, y completar diferentes test como exámenes de conocimiento en carretera y percepción de peligro, y una prueba de conducción. De la misma forma, estas entidades tienen en cuenta la edad de la persona, por ejemplo si es menor de 25 años, y su experiencia con el objetivo de concederles una licencia temporal que deberán usar por un período para luego obtener una licencia sin restricciones

Para tener en cuenta …

– Si no cumples con las reglas vigentes de conducción en Australia y sus estados podrías estar expuesto a pagar altas sumas de dinero en multas, y hasta meses en la cárcel. 

– En Australia y en cada uno de sus estados las reglas cambian en cualquier momento, así que es importante que estés atento.

– No en todos los estados aceptan las licencias de conducción extranjeras para manejar motocicletas o carros.

– Si manejas con tu licencia de conducción extranjera, el tipo de vehículo que manejes debe basarse en las condiciones de ese permiso.

– La National Accreditation Authority for Translators and Interpreters (NAATI) es la entidad autorizada para traducir oficialmente las licencias extranjeras al inglés.

– Si vas a aplicar a una licencia de conducción australiana, te recomendamos que te prepares muy bien, y, si puedes, pagues unas horas de práctica con un profesional antes de hacer el test de conducción.

– Algunas entidades ofrecen el servicio de intérpretes en caso de que requieras comunicarte con alguien en español para que te guíe en tu aplicación a la licencia.